jueves, 29 de marzo de 2018

Sueños de Medianoche





Historias Irreales y no tanto... 













Al principio fue un minúsculo botón. 
Raro, brillante. Confundiéndose y a la vez resaltando en la inmensidad de la noche. 
Imaginé sus ojos observando mi asombro. 
Un pequeño apéndice, alargado e inquieto, cobraba forma pegado a él. 
Cuando quise darme cuenta, el botón nadaba. Otros de igual especie nadaba también. 
Miré por sobre mi hombro: una marea punteada y veloz venía hacia mí. 
Atiné a correr. Corrí rápido, lo más rápido que mi aletargado vuelo nocturno me lo permitió. 
Y aunque al principio fue un minúsculo botón, al acercarse, su no boca se abrió, gigante. 
Y en un abrir y cerrar de sueño, me devoró.

Stella Maris Riera