domingo, 28 de febrero de 2016

Por qué escribe un psicoanalista?


Por qué escribe un psicoanalista?
En el libro Trauma y Repetición de Isidoro Gurman se plantea esta pregunta. Yo me permito tomar la frase del prólogo. Dice así:"Freud es un traumatismo"
Y como tal, para comprenderlo, volvemos una y otra vez sobre lo dicho, lo escrito, lo analizado, lo construído. No es casual que la gran mayoría de los psicoanalistas nos volquemos a la escritura. Surge como necesidad. Se transforma en deseo.
En mi caso particular, mi deseo me guía. La escritura me permite sublimar el dolor, ella es mi quita-penas, alivia mi alma y me gratifica enormemente. Así que aquí estoy, combinando el psicoanálisis con la literatura, uniendo dos pasiones que hacen de mi vida, un mundo donde me permito creer (como decía el maestro Pablo Picasso) que todo lo que puedo imaginar es real.
 
Stella Maris Riera

jueves, 25 de febrero de 2016

Pecados Cotidianos - 4 Violencia de Género

De la Serie: Las Diferentes Formas de Devorarnos
Pecados Cotidianos
4- Violencia de Género - Esa Maldita Rutina


Desgraciadamente esta vez "no es ficción" sino un hecho tristemente real.
Mi solidaridad con la familia, y mi absoluto repudio por este vil hombrecito (disculpen, pero no puedo llamarlo hombre)



La llamaron desesperados, contándole un hecho espantoso de esos hechos que creemos, sólo vamos a escuchar por la TV, porque claro, le ocurren a los otros. Alguien por el teléfono había dicho “ella está en coma” y María no se si preguntó mucho más, sólo supo que debía estar ahí. El tiempo apremiaba y Jujuy, ese día más que nunca, era un lugar demasiado lejos. Al llegar, la encontró internada, sedada, intentando recuperarse de la tremenda paliza que le había pegado su pareja (debería llamarlo así?!!!) La  encontré al poco tiempo que volvió, sola y decepcionada por no haber podido convencer a su hermana de abandonar a este hombre violento que hacía de esta joven, mamá de varios hijos, una mujer sometida y tristemente acostumbrada a los golpes de esta bestia. A pesar de la insistencia de su hermana su decisión fue  –que no puedo irme, que él es mi marido, el padre mis hijos, que mi lugar está acá- Y así fue que volvió a su vida de todos los días, a su rutina cotidiana, la de la cabeza gacha y el cuerpo lleno de moretones. Pasaron unos meses, no muchos y en la casa de María el teléfono volvió a sonar. Parece que su hermana finalmente se marchó. Otra mujer golpeada ha muerto.


Stella Maris Riera, Argentina (1958) - Psicoanalista - Oidora y Contadora de Historias

VIOLENCIA DE GENERO, otra vez…

Por favor, compartan esta información
tal vez haya alguien que esté pasando por una situación similar
leerlo podria hacerla reflexionar y cambiar el final de SU historia
Juntos Podemos - Gracias


Desgraciadamente esta vez "no es un cuento" sino la vida absolutamente real.
Mi solidaridad con la familia y mi absoluto repudio por este vil hombrecito (disculpen, pero no puedo llamarlo hombre)


La llamaron desesperados, contándole un hecho espantoso de esos hechos que creemos, sólo vamos a escuchar por la TV, porque claro, le ocurren a los otros. Alguien por el teléfono había dicho “ella está en coma” y María no se si preguntó mucho más, sólo supo que debía estar ahí. El tiempo apremiaba y Jujuy, ese día más que nunca, era un lugar demasiado lejos. Al llegar, la encontró internada, sedada, intentando recuperarse de la tremenda paliza que le había pegado su pareja (debería llamarlo así?!!!) La  encontré al poco tiempo que volvió, sola y decepcionada por no haber podido convencer a su hermana de abandonar a este hombre violento que hacía de esta joven, mamá de varios hijos, una mujer sometida y tristemente acostumbrada a los golpes de esta bestia. A pesar de la insistencia de su hermana su decisión fue  –que no puedo irme, que él es mi marido, el padre mis hijos, que mi lugar está acá- Y así fue que volvió a su vida de todos los días, a su rutina cotidiana, la de la cabeza gacha y el cuerpo lleno de moretones. Pasaron unos meses, no muchos y en la casa de María el teléfono volvió a sonar. Parece que su hermana finalmente se marchó. Otra mujer golpeada ha muerto.


Stella Maris Riera Argentina (1958) - Psicoanalista - Contadora de Historias

lunes, 22 de febrero de 2016

Calmar la Mente



 
Llega temprano, al alba. Cuando la humanidad aún duerme, se detiene. En silencio pretende no pensar; que su mente, voraz, se aquiete, que no haya mañana, tampoco ayer. Pretende, simplemente, contemplar su ahora, dejar que su mirada vaya lejos, que la brisa lo acaricie y cuando su piel, ardiente de tanto sol, busque sosiego, elevarse. A ratos, sobrevolar las olas, sumergirse, y aún con sabor a sal marina, cuando él lo decida, volver. Pretende ser él con su sueño: llegar temprano, al alba, y en silencio detenerse.


Stella Maris Riera, Argentina (1958) - Psicoanalista - Oidora y Contadora de Historias