El contexto hace
texto[1]: Es que cuando de adicciones se
trata, imposible olvidar el grupo de pertenencia. En este sentido tomo esta
frase, para que pensemos juntos acerca de este “contexto” léase familia,
grupo, sociedad, época. Una época que, a mi criterio, condiciona, aprisiona y
compele al individuo a actuar según los intereses del momento.
Contexto que sujeta al sujeto y lo lleva a consumir
una droga y no otra, a tener cierta modalidad en el consumo y no otra, cierto
modo de vínculo, lo lleva a seguir determinados ritos y costumbres. Este contexto lo lleva a consumir al
tiempo que lo consume.
Las adicciones nos convocan en
busca de la “la cura”, concepto discutido si los hay a lo largo de todos los
tiempos, entendiendo por adicciones todo tipo de consumo desenfrenado y
compulsivo.
El individuo consume a la vez que es consumido. Algunos consumirán sustancias, otros,
su posibilidad de sostener una familia, en la loca compulsión de tener una
relación, y otra, y otra más Tal vez para otros se trate de consumir
largas horas de su vida dedicados al trabajo o a un ideal, o más aún consumir la
libertad de quienes los acompañan y por supuesto, la suya propia[2].
Hoy en día se suele escuchar de adictos
al trabajo, al sexo, a las personas. Rótulos que según de quien se trate, a
quien se aplique, lo condicionará de ahí en adelante otorgándole una identidad
o un destino. Es en este punto donde el psicoanálisis abre una
brecha con otras disciplinas y haciendo de lado el objeto de la satisfacción,
piensa en el Sujeto y su deseo.
Cada uno tiene su propia búsqueda, y no me refiero solamente a la búsqueda de determinado
efecto sino, a la propia búsqueda en el sentido amplio que la palabra implica. Debemos
confiar, transitar el proceso desandando la historia. Nos vamos a sumergir en
ese baño de lenguaje que tal vez fue fallido, y paso a paso se posibilitará un
reencuentro. Juntos,
escucha y transferencia mediante, vamos a dejar atrás la satisfacción de la
necesidad, y abrir la palabra a lo simbólico. Abordaremos al sujeto con la
firme esperanza de encontrar al Sujeto[3].
Sujeto ahora con mayúsculas capaz de elegir por sí mismo, sabiendo de la Ley y
su Castración.
[1] Michael
Foucault afirma que los mecanismos del
poder son ejercidos desde todo lugar y en todos los ámbitos, incluso el
cotidiano. De manera explícita o subliminal aunque no seamos capaces de percibirlo.
[2] Personas dependientes de personas lo que también
suele conocerse como dependencia emocional
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