Lecturas Psi |
Pulsión: definida por Sigmund Freud como un proceso dinámico, consiste en un empuje, una carga de
energía.
Para
Freud la pulsión es un concepto límite entre lo somático (organismo) y lo
psíquico (todo lo relacionado con las funciones o elementos psicológicos)[1].
Sabemos
que el sujeto tiene excitaciones que provienen tanto del exterior como del
interior del organismo. De las excitaciones externas el sujeto puede huir o protegerse, en tanto
que de las internas no puede hacerlo. Ambas, tienen repercusión en el aparato
psíquico.
En el
texto “Las pulsiones y sus destinos” Freud menciona y describe los cuatro
elementos de la pulsión, a saber:
- objeto: el mismo será
variable y será elegido de forma definitiva de acuerdo a la singularidad e
historia de cada sujeto
- fin: no es uno,
sino que son múltiples, además de parciales, de ahí que hablemos de
pulsión parcial[2]
las que dependerán de las fuentes somáticas de las que provengan.
- fuente: también
son múltiples, y conocidas como zonas erógenas.
- empuje, se
refiere a la fuerza, a la exigencia de trabajo impuesta al aparato
psíquico.
Existen
diferentes etapas en el desarrollo libidinal del sujeto y como ya se explicó, están ligadas a las
zonas erógenas.
Estas
etapas son tres: Oral, Anal, y Fálica
En la
etapa oral, la zona erógena es la boca. Los niños obtienen placer chupando,
mordiendo, por lo que se llevarán a su boca objetos como también partes de su
propio cuerpo, manos, pies. Es el momento del autoerotismo. En la etapa anal, comienza el control de esfínteres, el placer está en retener y expulsar. En la
etapa fálica, (entre los cuatro y seis años aproximadamente) se descubren los
órganos sexuales, el placer consiste en tocarse, y los niños sienten curiosidad por la
diferencia de sexos.
Alrededor
de los seis años, con el comienzo de la etapa escolar, (y hasta los doce edad
promedio) el niño comienza un período conocido como de latencia donde su
interés se pone en aprender y en relacionarse con sus pares. (Cabe aclarar que las edades mencionadas son únicamente a modo orientativo, dado que estas etapas aunque sucesivas, no son cronológicas). Con el advenimiento de la pubertad llega
el “despertar sexual” donde ocurren nuevos cambios físicos y psicológicos. Pero
estos ya son temas que merecen un capítulo aparte.
Stella Maris Riera -
Psicoanalista - Universidad de Bs. As.
Atención del Niño y su
Familia
Atención individual del Adolescente y del Adulto
Dirección de correo electrónico: lic.smriera@yahoo.com.ar
Atención individual del Adolescente y del Adulto
Dirección de correo electrónico: lic.smriera@yahoo.com.ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario